Sin duda la agrupación liderada por Adam ‘Nergal’ Darski sabe imponer su presencia sobre el escenario, así fue como luego de varios años desde su última visita llegaron a darnos una cátedra completa de lo que es el verdadero black metal.
Los polacos llegaron con todo a Chile para presentar su nuevo álbum “I Loved You at Your Darkest”, tanto así que no huyeron al hecho de dar una caminata por el centro de Santiago para llegar al recinto donde se presentarían unas horas más tarde.
Una vez en el teatro poco después de las 21:00 horas la banda salió a escena donde al caer el telón negro pudimos observarlos con sus mascaras ya conocidas. De inmediato abrieron paso a esta experiencia con “Wolves Ov Siberia” con toda la energía que los caracteriza y por sobre todo al querido front man que se acercaba a sus fanáticos en cada oportunidad para saludarles.
Fueron los temas “Diamonos” y “Ora Pro Nobis Lucifer” los que encendieron los ánimos del público, quienes gritaban, agitaban los puños y disfrutaban realizando el headbanging al son de la música.
La puesta en escena y la interpretación no se quedaron atrás en ningún momento y resaltaron nada más y nada menos que al llegar el turno de “Bartzabel” provocando que la fanaticada coreara junto a los músicos la canción, mientras que un Nergal totalmente caracterizado con una mitra en la cabeza (como un sacerdote) hacia su actuación al centro del escenario.
Un setlist bastante completo nos regalaron durante esta noche donde todos pudieron ser testigos de canciones como “Ov Fire and the Void”, “God = Dog”, “Conquer All” y “Sabbath Mater” donde muchos cantaron y gritaron al unísono con las voces de la banda mientras que Nergal dedicaba palabras hacia sus fans agradeciéndoles la excelente energía.
“Fucking unbelievable Chile”, decía el vocalista, “los quiero mucho a todos”.
“Decade ov Therion”, «Blow Your Trumpets Gabriel», «Slave Shall Serve» y «Chants For Eschaton 2000» dieron continuación al ritual con la banda, donde bautizaron con sangre (falsa) a algunos de los presentes en el público. Mientras tanto un teatro sorprendentemente bien concurrido entonaba las canciones a gritos mientras algunos movían sus melenas incansablemente, de repente al medio de la cancha se veían un pequeño moshpit que apenas iba tomando forma.
La banda salió de escena por unos minutos y en menos de lo esperado regresaron para darnos una inolvidable despedida de la mano de “Lucifer” y “We Are the Next 1000 Years” donde el recinto se vio lleno de humo y con un tono rojizo lo que generó un ambiente que causaba escalofríos en la piel con solo escuchar las primeras notas. Al final de todo los miembros de la banda dieron cierre a la ceremonia con unos tambores que tocaron de manera enigmática terminando de golpe su presentación.
Si bien varios asistentes se mostraron resentidos por la rápida retirada de la banda desde el escenario todos quedaron satisfechos con la magnífica presentación de los polacos.
Fue un show preciso, con una gran puesta en escena y con un repertorio lleno de clásicos, así como también de temas nuevos donde el recibimiento de los fans fue igual de grandioso ,este entusiasmo fue reconocido por la banda luego de considerarlos como el mejor público dentro de este lado del mundo. Sin duda una noche que quedará guardada en el recuerdo de muchos.