REVIEW CONCIERTO | Mientras Dismember viva, el death metal reinará

Luego de 15 años y con la formación original, Dismember, los padre del death metal sueco pisaron tierras chilenas con dos únicas fechas en Latinoamérica, siendo en Santiago de Chile acompañados por Nefastor y Necrodemon.

Nefastor: DEATH metal de la calle

A las 19 horas los originarios de Santiago, Nefastor, iniciaban su show con «Hate in the night», tema extraído de su EP «Hate Yourself», inmediatamente lo que llama la atención a simple vista es la energía en tarima de cada integrante, cautivando al público presente en ese momento.

La banda según, su vocalista, se autodenominan «Thrash callejero», ya que realizan presentaciones a menudo en plazas de la ciudad, recalcando que no deben olvidar de dónde provienen y de sus orígenes

Nefastor tuvo un setlist conformado por 7 temas incluyendo el «Intro (Hellraiser)» , su potencia en el escenario y la ejecución de sus instrumentos en un género tan complicado como el thrash sumando a ello que son bastantes jóvenes nos dice tendremos asegurado nuevas generaciones de Thrashers en el país.

Su show culminó con los temas, «Feel the hate…No oppression» y «Calls from beyond» agradeciendo al público presente e incluso regalaron stickers de la banda y algunos discos para promocionar su trabajo, sin duda escucharemos más de esta banda en un futuro cercano.

Setlist:

Intro (Hellraiser)
Hate in the night
Rituals of shadows
Dead Emotions
Your Life is a lie
Feel the hate…No oppression
Calls from beyond

Necrodemon: el regreso

Proveniente de Arica, los legendarios de Necrodemon, volverían a los escenarios y de qué manera que teloneado a Dismember, con mas de 20 años de experiencia y su old melodic death metal es una de las bandas más representativas en la escena nacional.

La agrupación comenzó un poco antes de lo previsto su presentación, siendo las 19:45 aproximadamente el inicio, acto seguido y con el escenario ya preparado con los estandarte de la banda y dos grandes esculturas con la forma de una cabra a cada costado de la tarima, la banda interpretó «Plague of Christ».

Lo primero que pude observar es lo que significa 20 años de experiencia, se nota el esfuerzo realizado por la banda en cada detalle de su show, desde la decoración en tarima, atuendos, instrumentos, un buen sonido y una buena animación por parte de su vocalista Cristian Gallegos quién a pesar de estar un poco enfermo de la garganta, no fue impedimento para una gran presentacion.

Con respecto a su puesta en escena fue increíble, su show conto con llamaradas en ciertos temas acompañando los compases de los temas, humo, iluminación y una gran sincronización de los integrantes.

Su setlist fue un pequeño repaso de su música, contando con temas como «Satanized», «In the ecstasy of fire», «Regions of the non divine» y culminando con su ya clásico «Que muera el perro Jesús».

Setlist:

Intro
Plague of Christ
Satanized
In the ecstasy of fire
The lost kind of magic
Regions of the non-divine
Heaven’s disdain
Intro
The return
Floating away
Que muera el perro Jesús

Dismember: Mientras Dismember viva el death metal reinará

En internet leí una frase que decía «Mientras Dismember viva, el death metal reinará» y con ello empiezo esta pequeña reseña.

Partiendo un poco mas de las 21:07 horas, era el turno del tan esperado regreso, luego de 15 años, de la banda sueca, Dismember, con su formación original integrada por: Matti Kärki (voz), David Blomqvist (guitarra), Richard Cabeza (bajo), Robert Sennebäck (guitarra), Fred Estby (batería).

Iniciando con «Of fire» de su disco «Death Metal» el cual recién relanzaron remasterizado, encendió el Teatro Cariola, el cual estaba totalmente colmado de asistentes. Seguido de ello empezaron clásico tras clásico como «Sickening Art» el cual es un golpe al rostro de la ferocidad; «Fleshless», «Pieces» y una de las más esperada «Dismembered».

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Su setlist fue mayormente conformado por temas de su afamado disco «Like an Ever Flowing Stream» como «Skin Her Alive» tema donde el mosh fue una vorágine infernal, su vocalista Matti Kärki no dejaba de agradecer al público con una gran sonrisa, el bajista Richard no dejaban de pasearse por el escenario interactuando con la audiencia.

Durante su show no hubo pausa alguna, tema tras tema golpeaba las cabezas de los fanáticos, como todo lo bueno tiene que, lamentablemente, acabar la parte final de su show vino dado con los clásicos «Soon to Be Dead», «Casket Garden», «Life – Another Shape of Sorrow» y como regalo final «Bleed for Me».