Soen ha logrado algo único, en el sentido de que a pesar de ser un supergrupo, consiguió una fama mayor que en sus grupos individuales en un género que no es de donde ellos provienen, del death metal al metal progresivo.
Recientemente, anunciaron una segunda fecha en nuestro país en el club chocolate el próximo 25 de marzo adelantando su debut dos días antes de la primera fecha en la Blondie, probando que el público chileno estaba esperando con ansias el arribo de esta banda.
El metal progresivo iniciando con Pink Floyd y Genesis, pasando por Yes, luego Dream Theater y Tool, ha sido un género que en papel debería ser más underground, sin embargo, ha tenido una popularidad inmensa siendo Tool en los 90 una de las últimas bandas de metal progresivo grandes, es ahora cuando han aparecido otras bandas que quizás en unos años ocupen esos puestos.
Acá es cuando entra Soen, ya que, actualmente es esta una de las bandas que está muy bien posicionada para que en unos años logre grandes cosas. Con solo 4 discos siendo el más reciente “Lotus” del año pasado se han hecho conocidos en todas partes del mundo y han logrado tocar en muchos lugares y festivales.
Siempre se ha dicho que el sonido de Soen se parece mucho al de Tool y admito que, si tienen un parecido, pero no es una copia, se logra distinguir cual es cual, el parecido en el sonido solo me dice que Tool es una gran influencia, mismo caso que Greta Van Fleet y Led Zeppelin, quizás reciban ese odio ahora, pero si siguen por el camino en el que están, esas comparaciones pararan.
Si logras llenar la Blondie en unas pocas horas y luego haces lo mismo con el club chocolate, eso significa que la expectativa por verte es grande, no me esperaba que en Chile se esperaba tanto a Soen pero es prueba del impacto que han tenido en los pocos años de carrera que llevan. Probando así que el metal progresivo sigue siendo esa oposición de un género que en el papel no debería ser tan popular por lo complejo pero que en realidad es una de las ramas del metal que sigue juntando mucha gente y Soen es parte de ella.
Por: Ignacio Bataller
