El metal extremo tiene un nombre que resuena con una intensidad particular: Meshuggah. La banda sueca, reconocida por su complejidad sonora y técnica impecable, ha dejado una huella indeleble en el mundo del metal progresivo. Ahora, están listos para electrificar Santiago con un concierto imperdible en el Teatro Caupolicán el próximo 22 de octubre, donde los fans podrán experimentar en vivo el poder desatado de estos titanes del metal.

 

El caos hecho música: «Chaosphere» y la transformación de Meshuggah

En noviembre de 1998, Meshuggah lanzó uno de los discos más influyentes y brutales de su carrera: «Chaosphere». Este álbum marcó un antes y un después en la evolución de la banda. Si su anterior trabajo, “Destroy Erase Improve”, ofrecía momentos de precisión casi «hermosa», como lo describió su baterista Tomas Haake, “Chaosphere” fue un cambio radical. En palabras del propio Haake: «¡Destroy Erase Improve era precioso y alegre, mientras que Chaosphere no lo es!». Y no podría estar más en lo cierto. Este disco encapsulaba la brutalidad en su forma más pura, abandonando los elementos progresivos y dinámicos que los caracterizaban antes, para centrarse en un sonido más crudo y demoledor.

Algunos críticos y fanáticos vieron esto como una progresión natural de su estilo, una evolución que les permitía abrazar completamente el caos controlado que siempre ha sido su sello distintivo. Otros sintieron que habían dejado atrás sus matices más dinámicos. Pero una cosa era innegable: “Chaosphere” era un ataque sónico a todos los sentidos, una obra maestra que consolidó a Meshuggah como pioneros del subgénero djent.

 

 

Giras, accidentes y caos

Tras la grabación de “Chaosphere”, la banda se embarcó en una corta gira por Estados Unidos que, como era de esperarse, enfrentó algunos retrasos y desafíos. Sin embargo, esto no detuvo a Meshuggah, quienes continuaron presentando su brutal espectáculo en escenarios de todo el mundo, incluyendo una gira por Escandinavia junto a Entombed. A finales de los 90, se embarcaron en una gira con nada más y nada menos que Slayer, lo que catapultó su reputación en la escena metalera internacional.

La crítica de EE. UU. no tardó en rendirse ante el poder de sus presentaciones en vivo y el lanzamiento de “Chaosphere”. Los artículos de la prensa especializada destacaban la precisión y brutalidad de sus actuaciones, estableciendo a Meshuggah como una fuerza imparable en el metal extremo.

 

Los años de transición y nuevos horizontes

Después de años de giras y promoción de “Chaosphere”, la banda pasó por una etapa de transición. En el año 2001, lanzaron «Rare Trax», un álbum recopilatorio de demos y rarezas, incluyendo su EP “Psykisk Testbild”. Esta colección mantuvo a los fanáticos entretenidos mientras esperaban el próximo gran paso de la banda. Sin embargo, ese mismo año, Gustaf Hielm, bajista de la banda, dejó el grupo, lo que generó rumores y especulaciones sobre tensiones internas. A pesar de su salida oficial, Hielm continuó tocando con Meshuggah durante las giras, lo que hizo que muchos vieran esto como un simple tecnicismo.

No fue sino hasta 2002 cuando Meshuggah volvió a los estudios para comenzar a trabajar en su siguiente álbum, un proceso que fue lento pero prometedor. Las nuevas pistas demostraban que la banda seguía evolucionando, empujando los límites de su sonido y experimentando con nuevas técnicas, como el uso de baterías programadas basadas en los samples de Tomas Haake.

 

 

Meshuggah en el Teatro Caupolicán: Un evento inolvidable

Después de más de tres décadas de carrera y una evolución constante, Meshuggah sigue siendo una de las bandas más respetadas e influyentes del metal extremo. Sus álbumes, como “Chaosphere” y “obZen”, son verdaderas obras maestras que han dejado su marca en la historia del metal. Ahora, con su próximo concierto en el Teatro Caupolicán el 22 de octubre, los fanáticos chilenos tienen la oportunidad de experimentar en vivo todo lo que hace a Meshuggah una banda única: su técnica implacable, sus estructuras rítmicas complejas y su energía devastadora.

Este concierto promete ser una experiencia inolvidable, donde el caos y la precisión se combinarán en una explosión sonora que no dejará a nadie indiferente. Si eres fan del metal progresivo o simplemente quieres presenciar una actuación de una de las bandas más innovadoras del género, ¡no te lo puedes perder!

Asegura tus entradas y prepárate para una noche llena de caos musical, cortesía de los legendarios Meshuggah.

 

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