Este 24 de marzo, los amantes del metal en todas sus variantes tienen una cita imperdible en la Sala Metrónomo, donde A.N.I.M.A.L. celebrará tres décadas de música intensa, pasión y compromiso. La banda, cuyo nombre es un acrónimo de «Acosados Nuestros Indios Murieron al Luchar», ha dejado una huella imborrable en la escena musical desde sus humildes comienzos hasta su consagración como uno de los referentes del metal latinoamericano.
Los inicios de A.N.I.M.A.L. se remontan a 1991, cuando el carismático Andrés Giménez se unió a Robert Zelazek y Aníbal Alo para formar una banda que trascendería los límites del género. A pesar de algunos cambios en la alineación inicial, con Marcelo Corvalán ocupando el lugar de Zelazek en el bajo, la esencia de la banda se mantuvo intacta. Con un nombre que encapsula un mensaje poderoso sobre la lucha indígena en América Latina, A.N.I.M.A.L. desde el principio dejó claro que su música sería un vehículo para la conciencia social y el cambio.
En 1993, lanzaron su álbum debut titulado «Acosados Nuestros Indios Murieron Al Luchar», que marcó el comienzo de su viaje musical. Con un sonido influenciado por el heavy metal y el thrash metal clásico, este disco sentó las bases de lo que vendría después. Sin embargo, fue con su segundo álbum, «Fin de un Mundo Enfermo», cuando A.N.I.M.A.L. comenzó a llamar la atención de la escena musical. Incorporando influencias de bandas como Biohazard, Sepultura y Pantera, el álbum ofreció un sonido melancólico y apocalíptico que resonó con la audiencia.
Pero fue en la segunda mitad de la década de 1990 cuando A.N.I.M.A.L. alcanzó su punto más alto de éxito comercial. Con el lanzamiento de «El Nuevo Camino del Hombre» en 1996, la banda consolidó su sonido característico, una mezcla única de hardcore, metal y toques hispanos. Este álbum marcó un antes y un después en la carrera de la banda.
Al año siguiente, A.N.I.M.A.L. participó en un emotivo homenaje a las Madres de Plaza de Mayo, demostrando su compromiso con las causas sociales que les importaban. Y en 1998, con la producción de Max Cavalera de Sepultura, lanzaron «Poder Latino», un álbum que fusionaba influencias del nu metal y el hip-hop con la energía característica de la banda.
Hoy, después de tres décadas en la escena musical, A.N.I.M.A.L. sigue siendo una fuerza imparable. Con un legado que abarca desde sus inicios humildes hasta su éxito comercial, la banda continúa inspirando a nuevas generaciones de fanáticos del metal en todo el mundo. No te pierdas la oportunidad de ser parte de la celebración de este hito histórico en la Sala Metrónomo el 24 de marzo. ¡Prepárate para una noche de música, emoción y pura energía con A.N.I.M.A.L.!