Siempre es difícil poder realizar una reseña de una banda tan trascendental como lo es Megadeth, quienes estuvieron el día de ayer en el Movistar Arena con su Crush The World Tour 2024 junto a los nacionales de Saken.
Desde tempranas horas de la mañana, cientos de personas se apostaron en las afueras del Movistar Arena para poder entrar de primeros al momento de la apertura de puertas, la cual fue a las 18:00 horas.
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Durante la jornada pudimos ver distintas generaciones juntas, familiares, amigos, padres e hijos, todos unidos por un solo objetivo: disfrutar de la música. Incluso pudimos capturar algunas impresiones previas al show de Megadeth.
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Los encargados de iniciar la jornada son unos viejos conocidos de la banda, Saken, quienes ya previamente habían teloneado a los americanos en el 2016. En una entrevista con el medio Radio Futuro, su guitarrista Alvaro Font comentó sobre su incorporación al show:
«Nos pilló un poco de sorpresa, porque cuando se supo de la noticia de la venida de la banda, mandamos igual los press kits, mandamos toda la información que hay que mandar para postular por si acaso, porque decíamos, “no, qué nos van a elegir de nuevo, ni cagando”, porque habíamos tocado con ellos en 2016. Pero nos entusiasmaba la instancia de estar en el Arena, que es un lugar donde hemos podido tocar. Así que cuando nos avisaron, nos dieron el ok, cuando llegó el correo que Megadeth había dado el ok, fue increíble poder ser parte nuevamente de un show como este».
Con 30 años de experiencia encima, demostraron en tarima, por qué tuvieron el lujo de, por segunda vez, estar siendo la banda soporte de Megadeth. La recepción del público fue incluso mucho mejor de lo que usualmente se ve en los conciertos con las bandas soporte, todos saltando, disfrutando, coreando y calentando motores para lo que se venía.
Debemos destacar la gran sorpresa de los nacionales al tener un invitado de lujo como lo es el vocalista de Dark Funeral, Andreas Vingbäck (más conocido como Heljarmadr).
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Ya entradas las 21:00 horas, fue el turno de la vuelta a los escenarios chilenos del combo liderado por Dave Mustaine, Megadeth, quienes nos sorprendieron desde el principio con un setlist totalmente distinto a su pasada presentación en Perú.
Con el tema «The Sick, the Dying… and the Dead!» y de fondo la imagen de Vic Rattlehead, la mascota de la banda, iniciaron su show desatando la locura en un Movistar Arena totalmente Sold Out incluso con cientos de fanáticos fuera del recinto intentando entrar.
La primera sorpresa de la noche vino con el tema «Skin o’ My Teeth», del álbum «Countdown to Extinction» de 1992, que no interpretaban desde el 2018, con la característica camisa blanca de Dave Mustaine, el bajista James Lomenzo, la nueva incorporación Teemu Mäntysaari en la guitarra y el baterista Dirk Verbeuren fueron de menos a más dándonos un poema de recital.
«Dystopia» y «Hangar 18″ siguieron esta fiesta del metal junto a un público que no podía creer cada tema que tocaban ya que pareciera fuera un setlist escogido especialmente para el público chileno por lo especial y mágico que fue.
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Clásicos como «Sweating Bullets», «This Was My Life», «Angry Again», «She-Wolf» (de las más esperadas), «Trust» y «A Tout Le Monde» que corearon a todo pulmón hicieron inolvidable la noche, Dave nunca dejó de interactuar con el público agradeciendo su entrega incluso abriéndose la camisa en señal de rebeldía y pasión entregada por los asistentes.
Ya se venía la parte más pesada del show, con sus temas más legendarios como lo «Tornado of Souls», donde Teemu Mäntysaari se destacó en su destreza en la guitarra, por supuesto no pudo faltar uno de los temas favoritos por sus fanáticos, «Symphony of Destruction» y su distintivo: “¡Megadeth, Megadeth, aguante Megadeth!”.
Por supuesto, la mascota consentida dijo presente con el tema «Peace Sells… But Who’s Buying?». Vic Rattlehead sin duda, una de las sorpresas de la noche y que no estuvo incluida en el setlist fue «Mechanix» de su disco debut, «Killing Is My Business… And Business Is Good!» (1985), tema originalmente escrito para el disco «Kill ‘Em All» de Metallica antes de su expulsión.
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La cereza de la noche vino con el tema «Holy Wars… The Punishment Due«, tema ideal para un cierre sin precedentes lleno de energía, pasión y sudor en un público que, aún hoy, no cree la noche tan mágica que se vivió el día de ayer y que nunca se borrara de nuestras memorias.
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Nota: Luis Bonilla (@wildtus)
Fotos: @reinerphoto
