El pasado domingo 27 de noviembre hemos sido testigos de una nueva y asombrosa edición del festival Thrash Old True del que también fuimos parte en su primera edición en el año 2019 donde bandas como Hirax, At war y Sobernot fueron las encargadas de brindarnos un grán espectáculo. En esa ocasión fué Exodus la banda encargada de liderar el festival y qué mejor banda para representar el verdadero thrash que ésa, por lo tanto se ha repetido el plato fuerte para este año.

Cabrio – Foto por Francisco Rocco

El show dió comienzo puntualmente a las 18:30 horas donde Cabrio la banda encargada de abrir los fuegos se presentó sobre el escenario. 

A pesar de ser una tarde calurosa ya había bastantes asistentes dentro del Teatro Cupolicán y estaban más que dispuestos a disfrutar de lleno esta sobrecarga de thrash metal, ni bien comenzó el primer tema ya se veían puños en alto y un bien formado mosh al centro de la cancha del teatro, danzando en el ritual tradicional de este tipo de eventos. “Twenty thousand tons” se escuchaba a toda potencia, un sonido poderoso y estridente inundaba cada rincón del lugar y los fans presentes disfrutaban cada quien a su manera, algunos en los alrededores del recinto con una cerveza en la mano mientras movían la cabeza, algunos otros apoyados en la barricada agitando los brazos en alto mientras cantaban a gritos y los demás yendo en círculos dentro del mosh agitando sus poleras en alto. “Resurrected” y “Seed of deception” sonaron a continuación, la cercanía de la banda con el público era más que notoria, se podría decir que los chicos tenían al público en el bolsillo. Luego en un momento del show Andrés se colocó la característica máscara de macho cabrío y se encargó de animar al público para avivar aún más el moshpit justo para dar una noble despedida junto con “Fall and Pray”, tema con el que dieron fin a su presentación para dar lugar al segundo número de la noche.

Cabrio – Foto por Francisco Rocco

 

Slavery – Foto por Francisco Rocco

Justo a tiempo se presentaba sobre el escenario la banda Slavery quienes con su larga y estupenda trayectoria marcaban su huella en escena alzando aún más la vara en esta brutal velada. De inmediato al comenzar con su número la fanaticada agitaba sus puños violentamente y realizaban el headbanging al son de la música, sonaron varios clásicos pertenecientes a su álbum compilatorio “Genocide After the War” con los cuales la adrenalina y la locura iba en aumento. De principio a fin todas las canciones fueron acompañadas de ovaciones y aplausos, “After the war”, “Demon´s Sons”, “Genocide” y “No More” fueron algunos de los temas que se encargaron de encender la atmósfera, ninguno se quedaba atrás en el coro de las canciones.
Nos brindaron un sonido sorprendente, se podía sentir en cada golpe de batería y en cada riff de guitarra la ira y la energía que requiere precisamente el buen thrash para ser disfrutado como corresponde. No cabe duda que Slavery sabe precisamente de lo que se trata el thrash y sabe perfectamente cómo interpretarlo.
Una vez finalizada su presentación agradecieron profundamente a los oyentes por su apoyo y se retiraron rápidamente para continuar con el itinerario planeado.

Slavery – Foto por Francisco Rocco

 

Criminal – Foto por Francisco Rocco

El siguiente turno corresponde al de Criminal quienes llegaron al escenario sin siquiera requerir presentación alguna, inmediatamente fueron ovacionados y aplaudidos y sin más demoras comenzaron con el ataque de frenesí que brinda su música. Perfectamente podrían haber sido el número principal de la noche puesto que cada tema sin excepción fue cantado al unísono y fue mosheado de principio a fin. El descontrol reinó durante todo el espectáculo “Sistema Criminal”, “Rise and Fall”, “Stillborn” y “Caged” fueron algunos de los temas que sonaron durante la primera mitad de su presentación, un mar de manos en alto y los gritos de apoyo “¡Hey, hey, hey!” se escuchaban a todo pulmón, el mosh parecía haber recargado baterías y a cada minuto se veía más grande y más potente.
“Slave Master” comenzó a sonar y sin hacerse esperar todos los presentes hicieron segunda en cantar los coros, era evidente que la gente se sabía de memoria las canciones y que tenían aquel ímpetu para cantarlas junto con la banda.
“Collide”, “Zona de Sacrificio”, “Hijos de la Miseria” y “Worse” fueron las siguientes en retumbar las paredes del teatro, de pronto comenzó a surgir una ovación en coro para la banda: “Criminal, Criminal, Criminal”, las palmas en alto y el mosh a todo dar fueron demostraciones suficientes de que la banda tenía el control en ese momento y de que a los fans les estaba encantando el espectáculo. “New Disorder” fué el tema encargado de cerrar el telón para Criminal donde con un simple movimiento de muñeca Anton se hizo cargo de armar el moshpit más grande de la noche hasta ese minuto el cual fue perfecto para despedir a esta gran banda como corresponde.

Criminal – Foto por Francisco Rocco

 

Exodus – Foto por Francisco Rocco

Por último pero no en menos llegaba la hora de Exodus, las ansias se respiraban en el aire y a pesar de que el recinto no se encontraba en toda su capacidad el calor, la adrenalina y la locura podían verse y sentirse en cualquier dirección. Las luces se apagaron y comenzaron a sonar los primeros acordes, gritos de emoción surgieron entre la oscuridad y la cordura desapareció de golpe y sin previo aviso, “The Beatings Will Continue” daba inicio al show y como bien el nombre de la canción lo anuncia comenzó el retumbar de la batería, los miembros de la banda aparecieron en el escenario desatando más gritos y aplausos, todo el recinto se perdió por completo dejándose llevar por la brutalidad de la banda. “A Lesson in Violence”, Blood in, Blood out” siguieron poco antes de escuchar “And Then There Were None” donde todos cantaron a gritos mientras que el mosh al centro de la cancha parecía no tener fin ni descanso. No hace falta mencionar que todos estaban expectantes para ver de cerca a Gary o a Steve quienes se desplazaban de un lado a otro del escenario para poder saludar de tanto en tanto a los fanáticos que levantaban el brazo con todas sus fuerzas para captar su atención.

Exodus – Foto por Francisco Rocco
Exodus – Foto por Francisco Rocco

Nos regalaron temas recientes de su último álbum así como también clásicos tales como “The Years of Death and Dying”, “Deathamphetamine”, “Blacklist” y “Piranha”, en éste último Steve incitó al público a realizar un mosh más rápido y más alocado a lo cual obedientemente cumplieron sus deseos. En cada oportunidad Steve mencionaba lo enamorada que estaba la banda con el público chileno, el cual declararon era el mejor público sin duda y que prácticamente éramos sus mejores amigos, además volvió a recalcar su deseo de grabar un DVD de algún show que realicen en estas tierras.
“Bonded by Blood”, “Toxic Waltz” y “Strike of the Beast” dieron continuación, el mosh no paró durante el resto de la noche y la locura continuaba reinando por sobre todas las cosas. En mitad de una de las canciones Steve le hizo una seña a Lee Altus y apuntó a alguien entre el público, de pronto Lee se acercó para llamar con la mano a un pequeño jovencito que se encontraba en primera fila para que hiciera el esfuerzo de subir al escenario, luego de que le ayudaran a subir le pusieron la guitarra de Lee al hombro y le guiaron a tocar algunos acordes para luego regalarle una uñeta y regresarlo hacia el público donde se encontraba su padre quien lo acompañaba en esta oportunidad; sin duda fue el fanatico más afortunado de la noche.

Exodus – Foto por Francisco Rocco

Al final “War is my Shepherd” fué el tema con el que dieron un espectacular cierre a la velada, no cabe duda de que cuando del Thrash Metal se trata Exodus es la banda encargada de complacer al mundo. Terminada la canción, la banda se despidió totalmente complacida por los fans y prometió regresar en una nueva oportunidad para reencontrarse con su público favorito.

No queda nada más que agradecer a The Fanlab y Chargola Prod por hacer nuevamente posible un espectáculo de ésta magnitud y obviamente que quedamos ansiosos esperando por una tercera edición de este exitoso festival.

Exodus – Foto por Francisco Rocco

 

 

Nota por Marle Sanchez
Comparte esta noticia con tus contactos